Curso de Vacaciones

Para finales del año 2011, estuve como voluntario trabajando en el curso de vacaciones del club Nabajal. Durante este curso de vacaciones que duro aproximadamente 8 semanas entre los meses de octubre-noviembre-diciembre. En este curso de vacaciones se me nombro como Jefe de Área el cual tenía a cargo un área de juego en el curso del club de Nabajal. Mi área asignada fue la de Softball. Esta área tuvo sus grandes retos y a la vez grandes resultados. 

Como primer paso, tuve que aprender como jugar softball, esto gracias al entrenado der Club Nabajal. Sin embrago, fue un gran reto que me tomo aproximadamente unas dos semanas mientras me adaptaba al juego. Tuve que entrenar duramente, aunque no aprendí del todo pero aprendí conforme el tiempo y conforme se desarrolló el curso de vacaciones. Sumándole que era encargado del área tenía que velar por que mi área se quedara limpia y se mantuviera en orden conforme se desarrollaban los partidos y las actividades en mi área. También tuve que usar mi creatividad para poder realizar actividades nuevas para que los niños se sintieran motivados de jugar. Como mencione anteriormente tuve que aprender un nuevo deporte que nunca había jugado anteriormente, es decir, nunca había jugado al beisbol o al softball de tal manera para poder enseñarles a otros a poder jugar, sino más bien como una actividad sin fin alguno. Pero esta fue mi oportunidad de mejorar un lograr manejar bien mi técnica como jugador y entrenador. Esto me ayudó mucho para conocer mis dificultades y mis fortalezas en diferentes deportes. 

Durante el trascurso del curso de vacaciones tuve la oportunidad de realizar diferentes actividades. Una de estas fue la visita a la embotelladora Mariposa donde aprendimos sobre la producción de las gaseosas de la empresa Pepsi. Tuvimos la experiencia de conocer las diferentes etapas de producción y los diferentes diseños, sumándole un poco de historia de la empresa. 

También, tuvimos una actividad especial de padre-hijo, el cual fue la escalada del Volcán Pacaya. Esta actividad fue una experiencia totalmente nueva para mí, ya que nunca había subido algún volcán. Fue una gran experiencia y una actividad inolvidable ya que la conviví con mi padre y mi hermano grande, fue algo fabuloso. Esta actividad me ayudo a sobrepasar algunas debilidades y a aprender a vencerme a mí mismo, y así forjar la virtud de la fortaleza y seguir adelante aunque la situación sea difícil. Lo más importante que aprendí fue que después de un gran esfuerzo y dar todas mi energías pudimos apreciar algo totalmente hermoso ya que el paisaje en la cima del volcán fue algo impresionante. 

Finalmente, lo más importante de este curso de vacaciones es que tuve la oportunidad de asistir a medios de formación católica. Esto se debe que el Club Nabajal está confiado a la Prelatura del Opus Dei. Creo yo que esto ha sido lo más importante y lo más destacado de todo el curso de vacaciones. Ya que hoy por hoy, todavía sigo asistiendo un día a la semana a este medio de formación donde aprendo diferentes cosas que me ayudan a ser una mejor persona y un mejor cristiano, ya que es un deber para todos informarnos y aprender.